PAGO FLORENTINO 2008
● Bodega: Bodegas Arzuaga Navarro
● D.O./Zona: D.O. Vino de Pago
● País: España
● Tipo de vino: Tinto con crianza de 8 a 12 meses en roble francés nuevo.
● Graduación (% vol): 14,5
● Varietales: 100% Cencibel (Tempranillo)
● Precio aproximado: 12,00 €. En Bodegas Ortega (Madrid)
● Algunas calificaciones: 8,7 en Verema, 90 en La Guía de ABC, 92 en Vivir el Vino, 8,5 en Guía Gourmets
(añada 2009), y 89 en Peñín.
● Nuestra puntuación: 9,0/10
Ficha de Cata:
Vista: Limpio, brillante, con un color picota de
ribete granate intenso, con una capa altísima, glicérico y con mucho color en
su movimiento en la copa.
Nariz: De buena intensidad aromática, limpia, en
donde la fruta madura y casi confitada se ensambla muy bien con los aromas de
la crianza apareciendo toques torrefactos, cueros, cacao, especiados. En su
evolución en la copa el aroma se convierte en fragante, sensual y casi
goloso.
Boca: De buena entrada, potente y plena, con
sensaciones algo dulces al principio. Es sabroso, de buen cuerpo y estructura,
amplio, afrutado, casi carnoso, con los taninos intensos pero maduros, con buen
equilibrio de alcohol y acidez y un final largo y de grato recuerdo.
En resumen, un vino de los que hay que conocer para
valorarlos en su justa medida, de esos que son capaces de gustar y convencer
por su fuerza, sabrosidad y armonía. Con
el toque justo de la crianza para modelar y aromatizar una uvas de gran
calidad. Sin duda uno de los vinos que no faltarán en mi bodega ya que a sus
grandes cualidades añade otra también muy importante, y es que su precio es muy
razonable.
Nota sobre el vino y la
bodega:
Todos conocemos la famosa bodega de la Ribera de
Duero, Azuaga Navarro que elabora extraordinarios vinos. Esta bodega en 1997
decide emprender la elaboración de aceites y encuentra en la provincia de Ciudad
Real, en la zona de la Malagón, un terreno apropiadísimo para el cultivo de la
variedad “cornicabra”. Pero también encuentra una viña La Solana, con un
potencial enorme para el cultivo de la vid y, Florentino Arzuaga, el patriarca
de esta bodega, decide empezar a elaborar vinos de Cencibel (como en aquellos
lares se denomina a la Tempranillo) y poner a estos vinos el nombre de “Pago
Florentino”.
El primer vino aparece en la añada 2001 y, desde
entonces, su calidad y regularidad, las mismas cualidades que consiguieron
hacer grande sus vinos en la bodega de Ribera del Duero, son las normas de
identidad de este estupendo Tempranillo; tanto que han conseguido alcanzar la
distinción para esta bodega de Denominación de Origen Protegida Vinos de Pago.
En Pago Florentino, la Cencibel de La Mancha
consigue reflejar con fidelidad la nobleza, fortaleza, expresividad y encanto
de las duras tierras castellanas, armonizando sol, terruño, uva, técnica y
conocimientos para alcanzar un producto con personalidad propia.
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Bodega: Bodegas Jeromín
●
D.O./Zona: D.O. Vinos de Madrid
●
País: España
●
Tipo de vino: Tinto con crianza de 24 meses en roble francés y
americano.
●
Graduación (% vol): 14,5
●
Varietales: 90% Tempranillo y resto Syrah
●
Precio aproximado: 11,95 € en Bodegas Ortega (Madrid).
●
Algunas calificaciones: Gran Premio Viña de Madrid 2012; 9,0 en Verema
(cosecha 2004), 9,2 en Vivir el Vino, 9,0 en Peñín (cosecha 2006), 9,2 en la
Guía Vino 2013 de ABC, y 8,25 en Guía Gourmets 2013.
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Nuestra valoración: 8,7/10
Ficha de cata:
Vista: Limpio y brillante rojo picota muy oscuro, de
ribete granate cardenalicio y que debido a la intensidad de la capa de este
vino sólo se manifiesta en una línea muy estrecha. Tiene una densa lágrima que
arrastra color en su movimiento por la copa.
Nariz: Su intensidad es media, limpia, con los caracteres propios de la Tempranillo de Madrid y con una buena armonía entre los aromas frutales (de una fruta roja y negra muy madura) y la crianza, que aporta al conjunto notas de cuero, toffee, algún recuerdo animal, tostados, pimienta negra y cuero.
Boca: De entrada más suave que potente, al principio con ligeros recuerdos dulces, pero que en seguida dan paso a un vino más bien seco, de media estructura y cuerpo, con los taninos presentes, una acidez bien marcada, quizás sobresaliendo en exceso sobre el resto de características sápidas y que apoyada en unas notas amargosas le dan al vino un final largo y fresco.
Nariz: Su intensidad es media, limpia, con los caracteres propios de la Tempranillo de Madrid y con una buena armonía entre los aromas frutales (de una fruta roja y negra muy madura) y la crianza, que aporta al conjunto notas de cuero, toffee, algún recuerdo animal, tostados, pimienta negra y cuero.
Boca: De entrada más suave que potente, al principio con ligeros recuerdos dulces, pero que en seguida dan paso a un vino más bien seco, de media estructura y cuerpo, con los taninos presentes, una acidez bien marcada, quizás sobresaliendo en exceso sobre el resto de características sápidas y que apoyada en unas notas amargosas le dan al vino un final largo y fresco.
En resumen, es uno de los grandes vinos de la D.O. Vinos
de Madrid, aunque esta botella de la añada 2008 nos resulte con menos cuerpo y
estructura que la añada 2006. Es un buen Tempranillo, con un toque de
Syrah y que en esta añada consigue una
frescura extraordinaria. Un vino cuidado al máximo, no sólo en la selección y
tratamiento de la uva, sino por su magnífica presentación en botella; y que,
como todo lo que se mima y se realiza con especial cariño, resulta de una
destacable calidad. A lo que hay que añadir que se puede encontrar a un precio
muy competitivo.
Comentario sobre el vino:
Para hacer este vino, nos cuenta la bodega que de
los mejores pagos y de cepas de Tempranillo de más de 75 años con una
producción media de 1,5Kg por cepa, se seleccionan las mejores uvas, que son
vendimiadas a mano y en cajas de 20Kg para conservar intacta la calidad de las
mismas. Una vez en la bodega las uvas son tratadas con gran esmero y cuidado ya
que está n destinadas a crear un gran vino por su calidad y características
especiales. La fermentación se realiza en depósitos de 10.000 litros
controlando al máximo la temperatura para extraer de estas extraordinarias uvas
su máximo potencial de aromas y sabores. El vino permanece con los hollejos un
periodo no inferior a 30 días durante los cuales se realizan dos remontados
diarios de dos horas cada uno, con lo que el vino adquiere un gran cuerpo y
estructura. Acabada la fermentación alcohólica, el vino realiza la fermentación
maloláctica de una manera natural, tan importante en los vinos tintos de
calidad. Crianza: El vino pasa a barricas bordelesas de 225l, intacto para
conservar todas sus características. Son barricas nuevas de máxima calidad de
roble francés y americano donde el vino descansa 18 meses durante los cuales es
sometido a 4 trasiegos de barrica a barrica combinando tipo y antigüedad del
roble. Estas son los pasos necesarios para que este de vino vaya adquiriendo
complejidad, potencia, elegancia y personalidad que son las características que
más destacan en este “Cepas Viejas”.
ADARO 2009
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Bodega: Real Sitio de Ventosilla (Prado Rey)
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D.O./Zona: D.O. Ribera del Duero
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País: España
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Tipo de vino: Tinto con crianza de 12 meses en barricas de roble
francés más 3 meses en conos de roble francés de 20.000 l.
●
Graduación (% vol): 14,5
●
Varietales: 100% Tinto Fino (Tempranillo)
●
Precio aproximado: 13,50 € en Bodegas Ortega (Madrid)
●
Algunas calificaciones: 8,2 en Verema, 9,3 en Vivir el Vino (cosecha
2010) y 9,3 en Peñín.
●
Nuestra puntuación: 8,8/10
Ficha de cata:
Vista: De color rojo picota, con ribete granate,
limpio, brillante, de capa media-alta y densa lágrima con algún toque de color.
Nariz: De media intensidad, franco, sutil y
elegante, con mucha presencia de fruta roja madura, con la madera muy bien
integrada aportándole toques balsámicos y tostados; todo ello en muy buena
armonía y resultando en su conjunto de una gran calidad.
Nariz: De buena entrada, tan elegante como en nariz,
afrutado, con buen cuerpo, sabroso, amplio, seco, con los taninos maduros aportando
estructura pero ya bien pulidos, estupenda acidez y final largo, afrutado, con
ligero amargor.
En resumen: Es la segunda vez que catamos este vino,
la primera en noviembre de 2011, casi recién salido al mercado y ahora en la
cata que hemos denominado de grandes tempranillos a precios muy razonables. No
sigue pareciendo un vino muy interesante porque nos permite disfrutar de una
estupenda Tinta Fina (tempranillo) pero con la intensidad justa en la boca y un
paso fluido y elegante de los que permiten beber y disfrutar del vino.
Comentario sobre el vino:
Fermentación en depósitos de acero inoxidable con
temperatura controlada máx. de 28ºC y un periodo de maceración de 20 días.
Transcurrida la fermentación maloláctica el vino reposa durante 12 meses en barricas
de roble francés, que se completa con 3 meses en conos de roble francés de
Nevers de 20.000 l.
Pensamos que con este vino, D. Ángel Luis Margúello
ha conseguido su propósito: ser un vino que “no se come, se bebe” en alusión a
que es un vino que no satura la boca, más bien la cautiva. Un vino que
sorprende por su finura, donde se ha logrado domar muy bien la poderosa fruta
del 2009, sin que la madera se note apenas y deja un referente muy claro de
cómo los crianzas de 2009 pueden llegar a ser delicados y elegantes.
Este vino es un homenaje al fundador de la bodega,
Javier Cremades de Adaro que supo ver las posibilidades de esta finca y
convertirla en lo que ahora es; Adaro solo sale al mercado en las añadas
excelentes. Yo ya he tenido la suerte de probar la de 2010 y aunque diferente a
su antecesora, como no podía ser de otra manera, tiene en común la personalidad
y la elegancia; cualidades que acabarán
siendo seguro sus señas de identidad más personales.
Cata realizada por Carlos Enrique López
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